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En esta instalación se reproducen fielmente las condiciones de vida de los animales tropicales que en ella habitan. Temperaturas de 25-30ºC y porcentajes de humedad del 80-90% crean un ambiente muy cálido que no podemos dejar de percibir al entrar.
En el interior vamos a encontrar representantes variados del grupo de las mariposas* (Lepidópteros) de procedencias muy diversas, pero todas ellas tropicales. Además, tenemos otros artrópodos (insectos y arañas) variados y muy llamativos.
Todos estos animales, precisan de estas condiciones para facilitar la muda y evitar que sus esqueletos externos (exoesqueleto) pierdan elasticidad y se deformen o rompan, acabando con la vida del mismo. En el caso de las mariposas, la humedad ambiental evita el endurecimiento demasiado rápido de las alas, que impediría su estiramiento correcto.
Las plantas que habitan aquí, no sólo sirven de decoración, sino que además son nutricias de cada especie de mariposa (platanero, limonero, fruta de la pasión, etc). En ellas cada especie desarrolla su ciclo vital y metamorfosis. Algunas, como las plantas carnívoras intervienen en el control de la población y en la selección natural. Es crucial mantener la puerta cerrada para evitar la pérdida de temperatura y la salida de ningún ejemplar, que estaría condenado a muerte al variar bruscamente las condiciones ambientales.
En el pupario colgamos los “capullos” de las mariposas, y ellas salen constantemente por sus propios medios. Una vez completado su tiempo de metamorfosis, eclosionarán saliendo las bonitas mariposas que vuelan por el pabellón.
Tras atravesar esta instalación, nos encontramos con La Colmena, el hábitat de nuestras abejas melíferas. Una interesante área en la que los más pequeños de la familia pueden aprender sobre estos insectos, sus características y su peculiar forma de organización, ya que son animales sociales que habitan en colonias y se organizan por castas (la Reina, las abejas obreras y los zánganos).