La cobra albina, el perezoso de dos dedos o la tarántula roja de Brasil son algunos de los animales salvajes que más impresionan cuando los tenemos cara a cara. En Faunia, el Parque Temático de la Naturaleza, podemos verlos a todos ellos de cerca.
- Cobra albina de monóculo: La Naja kaouthia o también conocida como la Cobra albina del monóculo es una gran serpiente venenosa, un animal salvaje con una neurotoxina muy potente. Originaria de Indochina, Tailandia y el sur de China, es fácil que superen el metro y medio de longitud. Cuando se sienten en peligro, son capaces de aplastar las vértebras de la cabeza y extender una especie de capucha. Una marca ovalada marrón, visible cuando la cobra extiende la capucha, es lo que le da el sobrenombre de cobra de monóculo.
- Perezoso de dos dedos: Su nombre científico es Choloepus hoffmanni y proviene de Centroamérica y Sudamérica. El perezoso de dos dedos es un mamífero solitario, nocturno y arborícola, es decir, vive en las copas de los árboles de los bosques caducifolios. Lo más característico de este animal salvaje son sus lentos movimientos. Como curiosidad, el pelo les crece desde el vientre hacia arriba, no desde arriba hacia el vientre como ocurre en el resto de mamíferos.
- Manatí. Los manatíes o vacas de agua (Trichechus manatus manatus) son unos mamíferos marinos que habitan en aguas costeras cálidas y poco profundas y en ríos tranquilos en las partes tropicales del mundo. Son grandes animales salvajes: miden entre tres y cuatro metros y pueden llegar a pesar 300 kilos. Se diferencian de los dugongos por tener una cola aplanada horizontalmente en forma de espátula y no de media luna.
- Tarántula roja de Brasil. Este arácnido cuyo nombre científico es Nhandu carapoensis se encuentra en los bosques y selvas del sur de Brasil y Paraguay. Tiene unos pelos que son de los más urticantes entre las tarántulas. Es una araña poco agresiva, tranquila y muy dócil. Por ello, y por ser muy vistosa, este animal salvaje es muy solicitado como mascota. Otra peculiaridad es que tapiza el suelo con su propia tela.
- Tití Leon Dorado. El mono Leontopithecus rosalia llama la atención por su larga melena de color dorada. Su hábitat son los bosques tropicales de América del Sur y son animales muy sociables. El Tití León Dorado es uno de los animales salvajes más amenazados. La pérdida de su hábitat, la deforestación para cultivos y el turismo han puesto seriamente en peligro esta especie.